Francisco Javier López Farrera
Crítica del Arte I
6 de diciembre de 2012
Distrito Federal, capital del país,
llena de cultura, de elementos coloniales y prehispánicos, que con tan solo
caminar por las calles del zócalo la vista se comienza a enriquecer por el
espectáculo inusual que te sorprende y
te atrae de tal modo que te resulta difícil apartar tu mirada.
En cada esquina se pueden ver malabaristas como si fuera un circo ambulante
por los disfraces que utilizan como estatuas, payasos, mimos, personajes de
anime, lanza fuego y músicos callejeros como desde el mariachi, rockero hasta
el danzante que retoma su pasado prehispánico para
recordarnos nuestras raíces ancestrales. Pero también su población es una
mezcla de países, de emigrantes que llegaron para quedarse y que a la vez
aportan algo de su cultura y por ello se
crea una mezcolanza rica de culturas. La
cantidad de habitantes es tan grande que a la hora de que están en la parada
del metro resulta tan difícil subir por que son tantos los que quieren subir al
mismo tiempo que hay que estar alerta cada vez que llega un metro y tratar de
estar parado cerca de una de las puertas para lograr subir rápido y eso al
mismo tiempo hace que la ciudad se mueva
demasiado rápido. Al estar parado en una esquina esperando un microbús y
voltear a un lado se puede ver un puesto de revistas son una saturación de
imágenes con iconografía popular de la ciudad ya sea de los 50 que sigue
presente hasta lo más contemporáneo como
el periódico del día, la revista de las novelas, pornografía o revista para
“caballeros” hasta la revista muy interesante.
Humberto Valdez nacido en el D.F., este
ambiente saturado de imágenes será su entorno para crear su obra. Estudia artes en la escuela de San Carlos y
un tiempo después se va Valencia, España a hacer su maestría en Grabado y al
concluirla regresa a el D.F. y comienza
a crear grabados en un edificio de 5 pisos que se encuentra ubicado en una
unidad deportiva de la delegación la cual cuenta con ares para practicar
diferentes deportes y el edificio se adapto para poder enseñar varias
disciplinas artísticas con la intención de acercarlos y alimentar su
creatividad. El piso 4 Humberto comienza a impartir clases de grabado con la
intención de abrir un espacio llamado Taller de la Imagen del Rinoceronte
(TIR) para quienes tenían interés en
aprender grabado con las diferentes técnicas. Comienza a trabajar con la
temática de la iconografía de la ciudad con la idea del collage como simulando
la forma de vivir en la ciudad como si todas las imágenes estuvieran
amontonadas reinterpretando la idea de la sobrepoblación y la cultura popular
usando personajes como un luchador como el santo, Blue Demon y por mencionar algunos, la flaca recordándonos más que
un funeral una festividad como los es el día de muertos con todos sus colores,
calaveritas y papel picado en los panteones atados a los árboles que están
cerca de las tubas, la torre Latinoamericana que se encuentra en contra esquina
del edificio del Bellas Artes, personajes de películas de los 50,60,70 y hasta
la actualidad que lograron convertirse en un icono popular los cuales no son
solo mexicanos por que también están personajes de la iconografía norteamericana que logra impactar en la
ciudad por eso se convierte en iconografía popular. Alguna de las imágenes son
fotografías de personas que lo rodean y rótulos de precios de la fruta de un
mercado sobre ruedas. Líneas en su obra
que logran crear texturas como tela, metal, madera y hasta la
transparencia de una burbuja, la forma en la que juega con el ritmo de los
músculos para lograr el volumen de la
figura humana claramente demuestra que tiene un gran dominio en el dibujo
anatómico.
Un collage de imágenes con mucho
ruido visual tal como se tiene la idea de una ciudad con mucho movimiento es lo
que Humberto Valdez plasma en su obra porque a pesar de que trabaja el collage
tiene claramente noción de los principios del diseño y donde el elemento
primordial es la línea la base de todas sus imágenes, porque tiene muy bien
acomodado cada elemento de su obra como la bailarina de salsa de alguna
película clásica que tal vez en su infancia vio y recordó al caminar por alguna
de las calles de la ciudad al ver algún póster o en una revista de algún puesto
que tiene revista antiguas porque a pesar de que no es un personaje actual no
deja de ser vigente porque es parte de la cultura popular de la ciudad y debajo de la bailarina
se encuentra una niña celebrando sus quince años que es muy obvio por el
vestido blanco con su corona y con una sonrisa enorme en posición de modelado
para la toma de la foto de su fiesta la cual tal vez nunca olvide porque es el
paso de la niñez a la adolescencia, por el lado derecho se encuentra una imagen
de algún retrato de alguna persona que quizás conozca o convive con ella, pero
el semblante de su rostro es distinto a los anteriores por que es de seriedad y
saliendo de la penumbra pues solo algunas líneas blancas del cabello hacen la
separación de la sombra del personaje pero parecido a otro retrato que también el cual parece ser familiar que
se encuentra un poco más abajo que de igual manera maneja el mismo estilo de
definición del rostro por que también está hecho en plastas negras que con poca
luz forma el rostro. La mano de alguna
persona sosteniendo un revolver tal vez
de alguna revista que vio en uno de los muchos puestos de revistas que vio a su
paso, como también puede que la modelo en bikini retro algo muy popular en la cultura pop como la
temática que Humberto Valdez al parecer se encuentra trabajando en este
momento, como tal vez en su infancia probablemente observar a los animales que
están en el zoológico le causo asombro por eso es que podemos ver plasmada a
una jirafa y a algunos peces uno en la posición normal y los otros cuatro pero
en diferentes planos como si estuvieran muertos y flotando con el estomago
hacia arriba, al ver todas estas imágenes en su obras nos podemos dar la idea
de que es lo que el artista Humberto V.
puede ver en el trayecto a su taller donde crea esta producción de grabado en
el cual maneja la temática de la cultura
popular de una ciudad tan caótica como el D.F. con la ayuda del collage.
El retrato es la obra en la cual nos
muestra esta serie de imágenes ya mencionadas, hace una reinterpretación del
modo de vida de la ciudad, porque toda la iconografía que utiliza es el reflejo
de una mezcla de culturas que ya están establecidas, es por eso que ver su obra
es como conocer la ciudad. Tantos
elementos que nos muestra como la quinceañera esta por enfrente de la bailarina
y esta a su vez pero parece que se asoma para poder sobre salir de la
quinceañera que no logra pasar desapercibida por la posición en la que se
encuentra ya que si tal vez estuviera en otra posición parecería que es una
extensión del vestido de la bailarina, pero también los dos retratos que se
encuentra a un lado de ellas es claro que tiene más peso por el contraste que
hace con el juego de sombras que utiliza y la mirada fría con la que observa y
se impone ante los de mas tal como seria la forma que te vería una persona a la
que tal vez no le agrades o te resulte indiferente al observar la imagen de
Batman, que para algunos causo emoción al ver la serie por televisión o en
tiras cómicas como la de los puestos de revistas, que a su vez puede que algún
mecánico con gustos por lo retro haya encontrado un póster de alguna modelo en bikini y que al pasar
Humberto la reconoció y quiso plasmarla en su obra “El Retrato” como prueba de
que ciertos iconos por más que pasa el tiempo no dejan de ser populares en la
ciudad es como si el tiempo se detuviera. Pero con todo este ruido visual por
tantas líneas para arriba, otras para bajo, para la derecha e izquierda, se
puede ver un desorden muy ordenado que permite que tu vista no se centre en un
solo elemento, textura de muchas formas
como la que hace al quemar el linóleo crea una escala de grises como si fuera
el movimiento del aguas como se puede ver en la derecha inferior, que se
encuentra una masa circular que interpreto que es agua porque están unos peces
casi en el centro del circulo, a diferencia del grabado tradicional Humberto
busca nuevas formas de crear texturas mediante otros recursos y salir de lo
común. Parece que todos los personajes
de esta obra están posando y de repente de la nada sale una jirafa que se
atraviesa y logra salir en la fotografía mental de un retrato de un caminar con
Humberto Valdez.
Es claro que Humberto V. no solo nos
muestra la iconografía popular de la ciudad, si no que tal vez intencionalmente
está haciendo un registro del pasar de su vida en la ciudad, que con toda esta
cantidad de imágenes amontonadas hace referencia a lo caótico que es la ciudad
a la hora pico del día, porque son
tantos habitantes y tantos destinos a
los cuales van que parece que es lo que plasma con todas las líneas que utiliza
en la obra llamada “El Retrato” que es
muy evidente por los rostros y sus expresiones faciales y que si es parte de la
iconografía popular, es posible que el tiempo se detenga hasta que todas estas
imágenes dejen de ser populares.